jueves, 28 de septiembre de 2023

El Profesor infiltrado - Aristóbulo del Valle

 



Aristóbulo del Valle era un abogado y profesor de Derecho Constitucional en la UBA.

Y fiel a su materia, comenzó a criticar las elecciones fraudulentas de los gobiernos del PAN (1880-1916). Es por eso, que junto a Mitre y Alem, fundó la UNION CIVICA en 1890.

Participó de la revolución del parque del mismo año, y fundó, junto a Alem, la Unión Cívica Radical (1891) en oposición a Mitre.

En 1892, nuevamente hubo elecciones y la gente no pudo votar libremente. El presidente, Luis Sáenz Peña, no pudo controlar la crisis política que estaba generando la oposición.

Ante la presión de la UCR de realizar nuevas revoluciones, decide ofrecerle a uno de sus líderes un puesto de ministro y Aristóbulo del Valle fue nombrado Ministro de Guerra en 1893.

Grave error por parte del Gobierno, porque siendo ministro, Aristóbulo ideó la revolución de 1893.

Durante su mandato, de tan solo 42 días, fue un infiltrado en el gobierno y trabó las acciones del Ejército y la Marina lo que permitió a los radicales tomar varias provincias.




Había sólo una persona que podía frenar eso: Roca. Pasó de ser senador por la provincia de Tucumán a jefe del ejército y aplastó las revueltas.

Ante las derrotas en las provincias, Alem le ordenó a Aristóbulo dar un golpe de estado como último recurso, ya que era el ministro de guerra y podía hacerlo, sin embargo no lo realizó.

Del valle, era un destacado profesor de Derecho Constitucional en la UBA, y haber dado un golpe de estado, hubiera ido en contra de sus principios. La idea era obligar al gobierno del PAN a brindar elecciones libres (donde ellos estaban seguros que iban  ganar) y no tomar el poder por la fuerza.

Alem y Del Valle fueron presos.

Finalmente, Aristóbulo del Valle muere tres años después en enero de 1896 y Alem se suicida en julio del mismo año. La UCR perdió a sus fundadores, quedando a la cabeza, Hipólito Yrigoyen que llevará a cabo la revolución de 1905 y luego será presidente en 1916.

viernes, 22 de septiembre de 2023

Guerra de la secesión EEUU (1861-1865)

 


La revolución industrial había cambiado al mundo y ya estaba claro, que las potencias mundiales, eran los países industrializados que habían apostado a esta revolución (Inglaterra, Francia, Alemania).

Esta nueva economía mundial, dividía a los países en dos grupo: Los países industrializados (que creaban y vendían productos manufacturados) y los países no industrializados (que vendían materia prima a los industrializados).

Esto se denomina, en el capitalismo, “La división del trabajo”. Cada país debería “elegir” en qué grupo iba a estar y qué modelo económico iban a optar (Modelo Industrial o Modelo Agroexportador)

Algunos países no tuvieron dudas pero otros, como EEUU, que ya tenían fábricas (norte) y todavía vendían grandes toneladas de materia prima (Sur) tuvieron que definirlo con una guerra: La famosa guerra de la secesión (1861-1865).

El sur no quería perder las ganancias de vender algodón y azúcar al mundo con mano de obra esclava. Prácticamente, no tenían perdidas. Y el norte, que no tenía las condiciones climáticas para poder sembrar, apostaba a la industria y el obrero asalariado para que pueda comprar los bienes producidos.

Finalmente, ganó el norte y EEUU se alineó a las potencias industrializadas.


viernes, 15 de septiembre de 2023

Federalización de la ciudad de Buenos Aires

 



La federalización de la ciudad de Buenos Aires, es quizás, el hecho más importante de la historia argentina del SXIX.

La provincia de Buenos Aires, gracias a su ciudad, su puerto, su aduana y su dinero, lograba tener mayor poder ante las demás provincias. Esto pasaba desde la época de los españoles. No había igualdad a la hora de tomar las decisiones del destino del país. Buenos Aires, siempre se tomó, merecidamente o no, la atribución de decir por todas. Esta diferencia generó la famosa rivalidad entre unitarios y federales.

Fueron 70 años de asimetría y guerras entre provincias. Aquella ley, le quitaría la ciudad puerto a la provincia de Buenos Aires y pasaría a depender del Estado Nacional y directamente del Poder Ejecutivo. Por primera vez, el Gobierno Nacional no sería más huésped de la provincia Buenos Aires, ahora estaría en su propia jurisdicción.

El Estado Nacional existía hace 18 años, pero Buenos Aires seguía “gobernando” por poseer la Ciudad de Buenos Aires. Argentina aprendió, que el ente que gobernará debería poseer de ella. Por eso, de alguna manera, el verdadero Estado Nacional comienza en 1880 con la presidencia de Roca y la federalización de la ciudad de Buenos Aires.


Cuando la presidencia de Avellaneda llegaba a su fin, se pronosticaban los candidatos a próximo presidente. Por un lado, el actual gobernador de Buenos Aires, Carlos Tejedor que pretendía que la ciudad siga siendo de la Provincia. Y por otro lado, el actual ministro de Guerra, Julio Roca, que pretendía quitarle la ciudad a la provincia.

El 11 de abril de 1880, las elecciones dieron como ganador a Roca.

Rápidamente creció el rechazo por parte de Buenos Aires, llegando a la instancia de que se baleé la casa de Avellaneda.

El 29 de mayo, se dispuso la intervención de la provincia de Buenos Aires a raíz de la violencia.

El 1 de junio, ingresa por el Riachuelo, un barco con 5.000 fusiles Schneider y 500.000 cartuchos comprados por el gobernador de Buenos Aires, Carlos Tejedor.

El 4 de junio, el presidente ordenó desalojar la ciudad rebelde de Buenos Aires y mudar la capital al pueblo de Belgrano, donde la municipalidad, se transformó en la nueva sede de gobierno (Actual Museo Sarmiento). Avellaneda se alojó primero en el hotel Watson y más tarde fue huésped de la familia Astigueta, que ocupaba una casona en la esquina de Echeverría y Vuelta de Obligado.


El 9 de junio, Carlos Tejedor, al ver la “huida” del presidente, se instaló en la Casa de Gobierno.

Entre el 17 y el 30 de junio, se llevan a cabo las batallas entre el estado y la provincia de Buenos Aires. Nuevamente, Roca fue el encargado de organizar las fuerzas del estado y, nuevamente, vence. Finalmente, Tejedor se rinde.

El 24 de agosto el presidente Avellaneda envió el proyecto de ley para federalizar la ciudad de Buenos Aires haciendo real su deseo.

El 21 de septiembre de 1880, todavía en Belgrano, fue aprobada por el Congreso la Ley 1029 que federalizó la ciudad de Buenos Aires y otra prohibió a las provincias formar cuerpos militares.

“La ley que acabáis de sancionar fijando la capital definitiva de la República, es el punto de partida de una nueva era en que el gobierno podrá ejercer su acción con entera libertad.” (Roca, 1880)

Luego, el 6 de diciembre, la ley fue promulgada por Julio Argentino Roca, ya como presidente.

“Ella (La ciudad de Buenos Aires) responde a la suprema aspiración del pueblo, porque significa la consolidación de la unión, y el imperio de la paz por largos años. Su realización era ya una necesidad inevitable y vuestro mejor título a la consideración de la República será el haber interpretado tan fielmente sus votos. En adelante, libres ya de estas preocupaciones y de conmociones internas, que a cada momento ponían en peligro todo, hasta la integridad de la República, podrá el gobierno consagrarse a la tarea de la administración y a las labores fecundas de la paz; y cerrado de una vez para siempre el período revolucionario, que ha detenido constantemente nuestra marcha regular, en breve cosecharemos los frutos de vuestro acierto y entereza.” (ROCA 1880)

Desde 1880, la riqueza de la aduana y el poder de Buenos Aires, comenzó a ser administrado por el gobierno nacional de turno elegido con el voto. Nace la Capital Federal.

viernes, 1 de septiembre de 2023

Roca y su injusta condena política.

 


En 1879, Roca tuvo la oportunidad única de anexar el 60% del territorio ante el reclamo de Chile, ya que este estaba en guerra con Perú y Bolivia.

Para eso,  generó tratados con todas las distintas tribus/clanes nómadas que circulaban por esas tierras.  Si no aceptaban el sometimiento pacifico, les declaraba la guerra.

Exactamente lo mismo, pasó con los españoles (1810-1824), los ingleses (1806-1807 y 1982), los paraguayos (1811), los portugueses (1816) y los brasileños (1825).

Todo lo que consideramos el actual territorio nacional, fue peleado por el Estado Argentino contra otra nación o pueblo, ya sean españoles o mapuches. En otras palabras, le fue "quitado" a otro que lo consideraba propio. 

Se comete el error de considerar a las tribus indígenas como parte de la sociedad argentina, cuando nunca lo fueron. No se logró esa integración porque no compartíamos la misma organización social. Eran extranjeros que pretendían nuestro territorio al igual que otras naciones. Y fuimos a la guerra con ellos al igual que lo hicimos con otras naciones.

Roca, al igual que San Martin, Belgrano, Güemes, Mitre, Alvear, Lavalle, Alsina, Rosas (y muchos más) extendió el control nacional de la misma manera que lo hicieron todos: Peleando. Sin embargo, a los demás, no se los condena políticamente.

Ningún territorio nos fue regalado, todo se consiguió con trabajo, sacrificio y vidas de nuestros patriotas.