lunes, 16 de enero de 2023

El desembarco de Normandía

El famoso “Día D” no sólo pasó a la historia por ser una fecha importante en la segunda guerra mundial, sino que también llamó la atención porque los americanos hicieron lo que no se debe hacer en una guerra. Eligieron en una táctica suicida, y que al no estar en las expectativas alemanas, generó el factor sorpresa tan necesario para cualquier éxito.

Una táctica, que de salir bien, generaría el éxito de los aliados, pero de salir mal, generaría el éxito de los nazis. Un altísimo riesgo que el General Eisenhower decidió tomar.


Situación previa al desembarco

En 1944, los alemanes tenían el total control de Europa del Oeste y centro. El único frente de guerra era el este con la Unión Soviética.

Luego de la Conferencia de Teherán (1943) Churchill y Eisenhower acceden al pedido de Stalin de abrir un frente de batalla en el Oeste de Europa. De esa manera, generarían el efecto “pinza” contra los nazis.

Pero a diferencia de los soviéticos, los americanos e ingleses, no tenían ninguna base en Europa del oeste. Ellos se encontraban en Inglaterra a pocos metros de distancia de la Francia ocupada pero con un detalle muy importante: En una isla. Por lo tanto, la única manera de entrar a Europa para abrir un frente en el oeste, era mediante una invasión por agua.


Invasión por agua

Invadir por agua en territorio enemigo defendido, quizás sea de las peores y más arriesgadas tácticas de guerra. El invasor tiene 2 objetivos: Primero, ganar la batalla en la costa y segundo (y el más importante) lograr una “cabeza de playa”.

1-Cabeza de playa:

De nada sirve ganar la batalla en la costa, si rápidamente los soldados no reciben abastecimiento, apoyo de tanques, hombres y demás. Hay que tener en cuenta, que él que defiende, al estar en tierra, va a recibir apoyo de todo tipo en muy poco tiempo.

Por lo tanto, el principal objetivo es RESISTIR para crear una zona libre dónde los barcos puedan descargar (sin resistencia y lo más rápido posible) el resto del ejército invasor. Esto se llama “Cabeza de playa”.

2- ¿Dónde generar la cabeza de playa?

Si el objetivo de la “cabeza de playa” es resistir para que los barcos puedan descargar el resto del ejército, claramente debe ser una zona pensada para los barcos: aguas profundas (fondeo) y con facilidades para el atraque y la descarga de materiales y personal. Por lo tanto, las zonas mejor preparadas para esto, son los puertos ya existentes del enemigo.


La defensa alemana

Los nazis sabían que la cercanía con Inglaterra en Francia, generaba una tentación para una invasión por las aguas. Es por eso que Hitler le ordenó a Rommel fortificar la zona. El zorro del desierto llevó a cabo la fortificación de la costa francesa en lo que fue conocido como el “Muro del Atlántico”. Y teniendo en cuenta, que los puertos son los mejores objetivos para generar una “cabeza de playa”, reforzó los puertos cercanos a Inglaterra: CALAIS y CHESBURGO, principalmente, y luego EL HAVRE.

Los alemanes estaban convencidos que los aliados iban a desembarcar en CALAIS, por su puerto tan cercano a la isla, apenas unos 40 km de Dover. Además, los aliados habían movilizado todo un ejército a la ciudad a las ordenas de Patton. Un ejército que nuca se movió. Todo era para distraer. A su vez, CHESBURGO era un puerto mucha más grande y mejor preparado que el de CALAIS pero estaba a 120 km. Se cual fuera, ambos estaban muy bien fortificados.





Luego, se encontraban las zonas más alejadas de Inglaterra: todo lo que comprende entre CALAIS y CHESBURGO. La mayoría son playas (sólo hay un puerto importante: El HAVRE). Estas eran las costas menos defendidas, ya que por la distancia y la ausencia de puertos, pensaban que nunca iban a ser elegidos por el enemigo.





Operación Overlod

Contradiciendo todas las teorías militares, los aliados decidieron llevar a cabo un desembarco en aguas no profundas, sin ningún puerto cercano y en la zona de mayor distancia con Inglaterra: Las playas de Normandía. Lo llamaron “Operación Overlod”

Este “suicidio” táctico, tenía un sólo factor a su lado: EL FACTOR SORPRESA. Los alemanes nunca se imaginaron que se iban a arriesgar a tanto. Es por eso que la zona estaba muy poco defendida (únicamente la playa de OMAHA presentó cierta resistencia).

El verdadero miedo de los aliados, no era la resistencia en las playas, sino LOS REFUERZOS. Al estar en tierra, los alemanes podían enviar tanques desde CHESBURGO o EL HAVRE en pocas horas.

Es por eso, que antes del desembarco de infantería, paracaidista aterrizaron en los bordes de la zona de desembarco para boicotear caminos y puentes así los refuerzos tardarían más en llegar. La división 101 americana boicoteó la logística alemana del costado oeste y la 6 división inglesa la del este.

El desembarco fue un éxito, las batallas en la costa fueron ganadas pero todavía no tenían un puerto. Y sin un puerto, no iban a resistir mucho tiempo.





Puerto Mulberry

En toda la zona dominada por los aliados no había ningún puerto a la altura de un desembarco militar. Es por eso, que decidieron crearlo en pocas horas.

El principal problema que tenían eran las aguas poco profundas. Es por eso, que puerto artificial iba a estar lejos de las playas y se iba a comunicar con la costa a través de caminos flotantes.





A pesar de que el puerto artificial cumplía con lo prometido, era muy frágil. De hecho, el primero (frente a Saint-Laurent-sur-Mer) colapsó en una tormenta a los pocos días. El segundo (frente a Arromanches) es el que duró con pleno éxito. Es por eso, que tomar un puerto real, seguía siendo un objetivo.

Los aliados llegaron a Cherburgo por tierra, pero los alemanes lo destruyen antes de rendirse el 31 de junio.

Esta estrategia de ir destruyendo puertos, rutas y puentes a medida que iban en retirada hacia Alemania, les dificultó conseguir un puerto real.

Recién en Noviembre de 1944, los aliados tuvieron acceso a un puerto verdadero: El puerto de Amberes en Bélgica.